Atari (1978)

Atari 2600

Aventuras

Estreno de Superman en formato cartucho para Atari 2600

Superman de Atari 2600 utiliza uno de los recursos más usados en el sector del videojuego, las licencias cinematográficas. Hay que tener en cuenta que este viene dado por aprovechar el tirón en taquilla de una película, como sucede en este caso, con el lanzamiento simultáneo de un videojuego, o en fechas muy aproximadas (aunque hay excepciones). Aunque no siempre el resultado es óptimo, suele ser casi siempre todo lo contrario (con excepciones también).

Es recurrente mencionar el ejemplo de E.T el extraterrestre para Atari 2600, el cual arrastra la anécdota de ser uno de los mayores fracasos comerciales de la historia, y que las copias que no se lograron vender acabaron enterradas en un desierto de nuevo Méjico. Cabe recordar también que Atari pagó 20 millones de dólares por la licencia de la película de Steven Spielberg, una de las razones también de su enorme fracaso. Incluso existe un documental titulado Atari: Game Over (2014), en el que encuentran algunas copias del juego en el desierto de nuevo méjico.

En cualquier caso Superman lo único que comparte con ese denostado juego es la plataforma, la cual cuenta con un gran catálogo de juegos, y que ha pasado a formar parte de la historia de los videojuegos por derecho propio. Este cartucho para la consola Atari 2600 es un claro ejemplo del vínculo de los videojuegos con el cine, ya que se lanzó el mismo año que se estrenó la película Superman en las salas de cine. ¿Quién no habría querido encarnar el personaje de Superman por aquella época?

La historia de este juego de Superman es bastante simple, aunque tampoco es que los videojuegos tuvieran grandes historias por aquel entonces, no eran necesarias y jugaba un papel fundamental nuestra imaginación. Clark Kent se dispone a ir al trabajo, al Daily Planet como hace a diario, pero por desgracia el puente que tiene que cruzar para poder llegar a la oficina es destruido por Lex Luthor y sus secuaces. Además Lex Luthor ha sembrado de kryptonita Metropolis para debilitar a Superman y  si nos topamos con ella perderemos los poderes; pero podremos recuperarlos con un beso de Lois Lane. Esta narración está representada en el juego, por medio de una introducción realizada con gameplay.

La misión es bien sencilla, tendremos que hacer uso de una cabina de teléfono para ponernos el traje de Superman y reparar el puente, evitando que el helicóptero que vuela por el escenario nos alcance y nos robe el trozo de puente que llevemos encima. También deberemos capturar todos los villanos para llevarlos a la cárcel. No falta la habilidad de volar, una vez nos ponemos el traje, lo que nos permitirá movernos por el escenario más rápido.  Y también tendremos la habilidad de rayos x, que nos servirá para saber a qué escenario accederemos saliendo por cada lado de la pantalla.

Lo curioso de este cartucho de Atari 2600 es que podemos estar hablando de uno de los primeros Sandbox, ya que tenemos que realizar varias misiones, en el orden que queramos, generando una falsa no-linealidad. Es decir, podemos recoger las piezas del puente destruido y llevarlas a su posición inicial, capturar algún secuaz de Lex Luthor por el camino y llevarlo a la cárcel, o buscar a Lois Lane para recibir un beso si perdemos nuestros poderes.

También existen puertas de acceso a otras zonas, como el interior del Daily Planet, o bocas de metro que nos llevaran rápidamente a otra parte del mapa. Lo raro es que Superman use su habilidad de volar hasta dentro de los edificios, siendo ésta la mejor forma de desplazarte en este juego.

El apartado gráfico es sencillo pero funcional, ya que en todo momento sabremos que es cada objeto y que representa. Los fondos son variados y hay diferentes colores para diferenciar uno del otro. No existe música (salvo al finalizar el juego) una pena teniendo la banda sonora de la película Superman compuesta por el genial John Williams, pero sí efectos de sonido aunque bastante reducidos en número. Suena igual cuando somos impactados por la kryptonita que cuando somos besados por Lois Lane. El mismo sonido nos quita los poderes y nos lo da, curioso.

Si nos ponemos en la piel de un jugador que se enfrentó en su momento a este cartucho de Superman, suponiendo que la habilidad de aquellos jugones no sea la misma que poseemos hoy en día, el juego puede durar un par de tardes hasta que entendamos bien lo que hay que hacer. Pero enfrentarse ahora mismo a este juego, dejando a un lado el apartado técnico, puede que nos dure un poco más de cinco minutos. Por suerte existe un contador que marca el tiempo que llevamos jugando, y unido a la aleatoriedad de los enemigos, puede dar algo de variedad a cada partida.

Superman no es el mejor juego de este héroe de DC Comic, pero tiene el honor de ser el primer juego comercial de Superman de la historia de los videojuegos. No sería la última vez que veríamos al superhéroe en los videojuegos, destacando el Arcade de Taito lanzado diez años después. Este, además de poseer un apartado gráfico espectacular para la época, tiene una jugabilidad que se adapta perfectamente al personaje; mucho más compleja que el juego de Atari 2600. Faltarían unos años para que llegara Superman 64, título tiene el honor de ser el peor juego de Superman de la historia, y uno de los peores videojuegos que existen.