Konami (1991)
Game Boy
ACCION / PLATAFORMAS
¿Quién evitará que Shredder retuerza los cuellos de las tortugas favoritas de América?
Así comienza la sinopsis de la contraportada de la caja original de este juego de Game Boy, desarrollado por Konami y con Michiru Yamane en los créditos musicales. «Tortugas favoritas de América» y del resto del mundo donde se hubiera estrenado la película de Steve Barron, basada en el cómic y que conmocionó a muchos padres a la salida del cine.La película de las Tortugas Ninja no era tan de niños como muchos padres horrorizados pudieron comprobar en 1990 y muestra de ello la segunda parte, en la que en ningún momento de la película, estas tortugas ninja usan un arma ¡Hasta pegan a los malos con una ristra de chorizos! habiendo sufrido una rebaja en tanto en la violencia verbal, como en la física por las críticas a la primera película. Yo recuerdo después de ver la primera entrega, por aquel entonces tenía casi 10 años, salir alucinando del cine por la cantidad de palabrotas por minuto que se habían dicho en la película. Coño, ¡hasta había una rata lanzando improperios! Una maravilla.
Como fan de las tortugas, como millones de niños por aquel entonces y fan absoluto de la serie y los cómic, que aún conservo a día de hoy, no podía faltar un juego de ellas en mi consola de por aquel entonces, la Game Boy y gracias una vez más a mis padres, los encargados de surtir mi catálogo de juegos de entonces, pude jugar a este juego en unas navidades.
Este pequeño cartucho me emocionó por completo. Tanto como para recordarlo con cariño a día de hoy y habiéndolo jugado hasta el final por no se cuanta vez ya, antes de escribir este texto. Lo cierto es que es un juego demasiado sencillo, adaptado para jugadores no habituales o niños de por aquel entonces, tanto, que incluso el primer día de jugar a este cartucho, recién estrenado, llegué al enemigo final, apagando la consola para no terminar el juego en mi primera sentada. Aumentado la dificultad en posteriores partidas con los logros personales de por aquel entonces: «voy a terminarlo con una sola vida….»
Y es que Fall of the Foot Clan es un juego muy sencillo, quizás demasiado, pero bonito a rabiar y más por aquel entonces. Es un cartucho que se puede terminar en poco más de 20 minutos (21 minutos me ha llevado terminarlo esta última vez) algo que hoy en día haría llevarse las manos a la cabeza a muchos (sino mirad lo ocurrido con Ground Zeroes) y que por aquel entonces era una tónica habitual. Lo único es que los juegos se maquillaban con dificultades desmedidas en algunos casos, para ocultar su corta duración y en este primer juego de las Tortugas Ninja, la dificultad brillaba por su ausencia.
Aun así, es un cartucho que todo niño de por aquel entonces disfrutó, y si eras fan, aún más. Teníamos la posibilidad de elegir nuestra tortuga favorita y aunque era más estético que jugable, la mía siempre ha sido Leonardo. Además era lo bastante variado como para no hacerse monótono, con secretos ocultos, como las fases de bonus que debías buscar y con unos jefes de final de fase enormes, pero con mecánicas demasiado sencillas. El único que planteaba algún problema es Shredder, por sus tollinas destructivas que bajan dos puntos de vida, el resto es un paseo.
Es curioso que el cartucho no se librara de la censura, obviando la palabra «Ninja» en el titulo del juego. Se cambió de «Teenage Mutant Ninja Turtles», al «Teenage Mutant Hero Turtles» con el que llegó aquí. Ante todo, esta tortugas, eran los héroes de todos los niños de los 90 y yo fui uno de ellos.